Hormiga faraona

(MONOMORIUM PHARAONIS) 

BIOLOGÍA: Las colonias tienden a ser grandes con obreras que llegan a ser desde miles hasta varios cientos de miles. Por lo general hay varios cientos de hembras reproductoras en este tipo de colonia.  Aunque se producen hembras aladas, no se presentan vuelos de enjambre y el apareamiento se lleva a cabo dentro del nido.  Las nuevas colonias pueden formarse por brotes, con tan solo 5 obreras, 10 preadultos y una reina que migran de la colonia original. Las obreras viven unas 9 o 10 semanas. Las reinas viven de 4 a 12 meses.  En las hormigas Faraón han encontrado más de una docena de bacterias patógenas.

RECONOCIMIENTO: Muy pequeñas. Miden aproximadamente 1/16 de pulgada de largo. Su color va de amarillento a rojo con marcas negras en el abdomen.

HÁBITOS: En áreas interiores la hormiga Faraón anida en áreas cálidas cercanas a sus fuentes de alimento y o humedad. Por lo general sus nidos se localizan en zonas inaccesibles. Las obreras tienen un radio de acción muy amplio en sus búsquedas de alimento y agua. La hormiga Faraón es un problema muy común en establecimientos comerciales  de manejo de alimento como hoteles, tiendas de autoservicio, hospitales, etc.

En el exterior esta hormiga parece tener una menor importancia. Tiene una amplia preferencia en relación a sus alimentos, variando desde mieles hasta fruta, pasteles, carnes e insectos muertos.

CONTROL: El uso de insecticidas hace que la situación empeore debido a que provoca la  dispersión de la colonia y provoca nuevos brotes que forman nuevas colonias, la inspección inicial es crucial para determinar la ubicación de los nidos, hay que buscar principalmente cerca de las fuentes de humedad y como puntos secundarios cerca de las fuentes de alimentación.

Por lo general el cebado es el único método de control efectivo, hay que utilizar solo una estación de cebo por línea de hormigas, colocándola tan cerca como sea práctico, por los lugares donde las hormigas entran, es importante comprender que no se deben aplicar aerosoles o molestar a las hormigas en las estaciones de cebado.